1. Visualización de luz blanca: Imagina un escudo de luz blanca a tu alrededor, protegiéndote de cualquier energía no deseada. Visualiza esta luz purificando y fortaleciendo tu campo energético.
2. Uso de cristales protectores: Lleva contigo cristales como la turmalina negra, el ónix, la obsidiana o la selenita que tienen propiedades protectoras y pueden absorber energías negativas.
3. Limpias energéticas: Realiza limpiezas energéticas periódicamente, utilizando técnicas como el sahumerio con salvia blanca, palo santo o incienso de mirra para purificar tu entorno y tu campo energético.
4. Meditación de protección: Dedica tiempo regularmente a meditar y conectar con tu ser interior. Durante la meditación, puedes pedir protección y guía espiritual para fortalecer tu campo energético.
5. Reiki y otras terapias energéticas: Recibe sesiones de Reiki u otras terapias energéticas para equilibrar y fortalecer tu campo energético, así como para liberar energías no deseadas que puedan estar afectándote.
6. Establecer límites energéticos: Aprende a establecer límites claros con las personas y situaciones que te drenan energéticamente. No tengas miedo de decir no cuando sea necesario para proteger tu energía.
7. Cuidado del cuerpo y la mente: Mantén un estilo de vida saludable que incluya ejercicio regular, una dieta equilibrada, descanso adecuado y prácticas de gestión del estrés para fortalecer tu cuerpo y tu mente, lo que a su vez fortalecerá tu campo energético.
8. Escuchar tu intuición: Presta atención a las señales intuitivas que recibes sobre personas, lugares o situaciones que pueden no ser beneficiosas para tu energía. Confía en tu intuición para guiarte hacia entornos y relaciones que te nutran y te apoyen.
Dra. Nilmaris Segarra Méndez
Medicina general, Master Reiki- Usui, Certified Energy Healer, Auriculoterapia
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